Bueeeeeenas noches!!! Aqui teneis el CAP, me ha salido demasiado largo I'm sorry... Espero que os guste!


CAPÍTULO 39

Cuando llegó a casa de Harry no estaba muy seguro de lo que estaba haciendo. ¿Por qué iba a hacer caso a Evelin? Quizás fuera porque realmente sí quería hablar con su amigo, no le quería perder y menos por una chica. No le gustaba el hecho de que Harry se hubiese lanzado a su cuello nada más cortar con ella, pero, era su amigo y al menos merecía el beneficio de la duda.
Respiró hondo y llamó a la puerta, pero no obtuvo respuesta. Dio una vuelta alrededor y vio que todas las luces estaban apagadas, cosa rara teniendo en cuanta que ya era de noche. Decidió ir por su cuenta a buscar a Raquel, aunque fuese por los alrededores. Ya hablaría con Harry mañana. El problema ahora era, qué iba a hacer sí la encontraba, qué iba a decirle sí la encontraba cuando se suponía que no era importante para él.

- ¡Niall! -se giró al reconocer la voz de Harry a sus espaldas.

Al final sí que iba a tener que hablar con él.

- ¿Qué haces a aquí? -le preguntó el de rizos metiendo las manos en los bolsillos de su cazadora marrón.

- Eve me ha pedido que te ayude a encontrara a Raquel, que no sabéis donde está o algo así ¿no? -intentó quitarle importancia al hecho de que él también estaba preocupado.

- Sí -Harry dio una vuelta sobre sí mismo mirando alrededor -seguro que está bien pero... No nos coge el teléfono...

- Bueno a mi menos -contestó Niall.

- Ya... -dijo el otro -¿te parece sí vamos primero hacia Regent Park?

El otro se encogió de hombros y ambos se dirigieron hacia allí. Por el camino ninguno de los dos abrió su boca, Niall no sabía cómo sacar el tema, ni siquiera tenía claro sí quería sacar el tema. Y Harry no sabía que decir. La tensión era tan palpable que podría cortarse con un cuchillo.

- A lo mejor está donde los patos -habló Harry -a mí me gusta ir a verlos cuando no se qué hacer.

- No -contestó Niall rápidamente -les tiene miedo.

Recordó su primera "cita" cuando quiso acercarla a ellos y casi le da un infarto.

- Niall... -este se giró a mirarle -siento sí te ha molestado que haya estado con ella. Pero tampoco lo entiendo, tú mismo le has dicho que nunca te habla importado, así que ¿que más da?

- Eso no se hace Harry -contestó serio -no es de buenos amigos.

- ¿Y sí yo quiero estar con ella? -preguntó haciendo que Niall se girara a mirarle -¿no puedo porque tú lo estuviste?¿No te parece injusto? -abrió la boca para contestar pero volvió a cerrarla sin saber que decir, sí le parecía injusto -y más cuando tú nunca la has querido.

Aquello le llamó la atención.

- ¿Me estás diciendo que la quieres?

Harry se encogió de hombros y siguió andando por el parque.

- No lo sé.

- Tienes que saberlo -contestó Niall.

Él lo sabía, sabía que la quería y sí Harry sentía lo mismo intentaría aceptarlo, aunque ninguno de los dos fuese bueno para ella. Al menos ya, el sentimiento de culpa por arruinar su vida privada pasaría a otra persona.

- Quizás, con el tiempo -contestó sin querer pensarlo demasiado -tampoco es que tengamos nada.

El rubio suspiró relajando la tensión de los hombros. No tenían nada, de momento. Pero sabía que la debilidad de Raquel siempre había sido Harry y que tuvieron una cita antes de que empezaran. El propio Darragh le dijo en su cumpleaños que les había pillado encerrados en un armario. Pero había decidido confiar en ella, porque le había demostrado que podía hacerlo. Quizá, ahora viéndolo desde fuera, nunca había tenido posibilidades realmente, y ella le había elegido porque sabía que podía tenerle, mientras que Harry era más independiente.

- ¿Estás bien?

Niall asintió parpadeando rápidamente para que la humedad de sus ojos desapareciera.

- Niall, ella te quiere. Aunque no lo vaya a reconocer nunca. -miró a su amigo sin terminar de creérselo -y aunque a ti ya no te importe eso está ahí y no se olvida de un día para otro.

- Bueno -cogió fuerzas -es pasado y lo mejor que puede hacer es olvidarme e irse con alguien a quien sí le importe, y sí a ti te importa -no podía creerse lo que iba a decir pero antes de que se diera cuenta las palabras salieron escopeteadas de su boca -quédate con ella.



Al igual que caí dormida la primera a mitad de la segunda película, me desperté la última. Había dormido como una reina la verdad. Eve y Cel seguían en la cama hablando entre ellas, Menos mal que me había puesto en uno de los laterales dejando a la rubia en el medio. 

- ¡Buenos días! -dijo Cel cuando me senté estirándome cuán larga era.

- Hola -contesté con una sonrisa -¿qué hora es?

- Las doce de un perfecto domingo sin trabajo -dijo Eve con una sonrisa de oreja a oreja por no tener que trabajar.

- ¿Sabéis? -intervino Cel -podríamos ir a patinar sobre hielo. 

Tanto a Evelin como a mí nos hicieron los ojos chiribitas, adorábamos patinar aunque a ella le gustaba más sobre hielo y a mí sobre ruedas, pero a las dos nos encantaba.

- Supongo que eso es un ¿sí? -dijo Cel sonriendo orgullosa de su propia idea.

- ¿Cuando salimos?

La pista no era especialmente grande pero como estaba prácticamente desierta no necesitábamos más. Eve seguía con la misma cara medio inexpresiva de ayer y cuando se ponía así era o bien porque ocultaba algo o porque estaba triste. Y sí era por tristeza me daba en la nariz que sería por Zayn. Claro que sí había visto a Zayn... A lo mejor también había visto a Niall...

- ¡Eh! -una voz nos sobresaltó a las tres casi haciéndonos caer. 

Nos giramos para encontrarnos a Liam apoyado en la valla blanca que delimitaba la pista con una sonrisa en la cara. ¿Por qué cojones estaba ahí? Cel se acercó rápidamente dándole un fuerte abrazo y pasando su mano helada por el cuello de este, simplemente para hacerle de rabiar.

- ¿Crees que habrá venido el resto? -le pregunté a Eve temiéndome su respuesta.

- Solo, seguro que no está -contestó enlazando su brazo con el mío -recemos porque sea Louis...

Nos acercamos a él que nos miraba enfadado intentando esconder, sin mucho éxito, la sonrisa. Con Liam la cosa era así, era tan buena persona que el hecho de estar a su lado o ser la causa de su sonrisa te hacía feliz. Y por un momento no me importaron ni Niall ni Harry, sólo quería ir allí y darle un abrazo, porque se le había echado de menos.

- ¿Qué haces aquí? -le pregunté después de darle ese abrazo.

- Vi el tweet de Cel -explicó, ¿cómo que un tweet? -que ibais a patinar y pensé, tendré que pasarme a saludar ya que a ellas parece que no les importa contar conmigo.

Evelin y yo nos sentimos fatal al segundo.

- ¡No es eso! -dijo ella apenada.

Liam se río relajando el ambiente y dando a entender que se trataba de una broma. Miró hacia atrás y agitó el brazo. Me concentré en el punto donde estaba mirando y ahí estaba, Niall. Y para mi sorpresa, justo detrás, Harry. ¿Habían venido juntos?

- ¡Paso, paso, paso! -Celia se apartó rápidamente justo cuando Louis chocó fuertemente contra la valla -señoritas -se agachó haciendo una reverencia y sonrió de oreja a oreja.

- ¿Que habéis venido todos? -preguntó Evelin.

- Sip -contestó Liam -Zayn está alquilando nuestros patines.

- Yo voy un paso por delante -dijo Louis -masta from Doncaster -hizo el gesto que solía hacer con Zayn, con su juego de "Westside", por el que juntaban el dedo índice y corazón, haciéndonos reír.

Intenté imitarlo por enésima vez pero seguían sin salirme, ¡no podía ser tan difícil! Liam lo hizo también dejándome por los suelos y Louis se echó a reír.

- ¡¡Torpe!! -agarró mi mano y retorció los dedos, dejándome muerta de dolor.

Le di un empujón apartándole y se tuvo que agarrarse a la valla para no caer.

- ¡Bruto! -le dije restregando mis pobres y doloridos dedos -¡casi me los rompes!

Celia y Evelin se echaron a reír mientras Louis me hacía burla. Que gracioso todo, me partía la caja vamos. Menos gracia me hizo aún cuando finalmente Niall y Harry llegaron donde estaba Liam apoyado. Que mal había salido todo el tema de desaparecer.

- Evelin -dijo Harry apretando la mandíbula, claramente enfadado.

- Dime -le obsequió con su mejor sonrisa de inocencia.

Niall y Harry se miraron un momento conscientes de algo que yo no entendía. Al instante las piezas encajaron, Eve había sembrado el caos entre ellos dos. La fulminé con la mirada y ella se encogió de hombros.

- Vamos -agarró mi mano tirando de ella -os esperamos en la pista.

Louis se agarró al brazo de Celia, no sabía yo que se le daba tan mal patinar, al fin algo en lo que no eran perfectos. Al menos Louis.

- ¿Qué has hecho? -susurré cuando nos alejamos de ellos.

- Una mera lección de justicia -la fulminé con la mirada.

Justicia decía la tía, ósea que la había liado parda. Eso era justicia para Evelin.

- No podían hacerte todo lo que te han hecho y salirse de rositas -fui a quejarme indignada a más no poder pero me paró levantando la mano -además he conseguido que se arreglen, aunque haya tenido que decir que estabas desaparecida y nadie sabía nada de ti.

- ¿¡Que has hecho qué!?

- ¡Se lo merecían!

- Eve, no me han hecho nada, todas los cosas que han pasado me las he buscado yo. 

- ¿¡Niall no te ha hecho nada!? -dijo exasperada.

Miré hacia otro lado sabiendo que había dado en el clavo.

- Pero Harry no... -contesté con la boca pequeña -no ha hecho nada malo.

- Y por eso me voy a disculpar con él, pero Niall se lo tiene bien merecido.

- A él le habrá importado una mierda -contesté.

Eve bufó sin creerse nada, pero las cosas estaban ahí, por mucho que se empeñara en no querer verlas.

Me pasé media hora con Louis, enseñándole a patinar, en realidad lo que quería era apartarme del resto. Y la verdad es que hacer algo mejor que Lou era demasiado bueno para ser cierto.

- ¡Deja de cachondearte de mi ya! -dijo cuando se cayó por tercera vez y no podía dejar de reírme.

- ¡Sí es que no me haces caso! -le contesté agarrándole por el brazo para que se levantara -tienes que ir al mismo ritmo, no puede ir un pie más rápido que el otro ¡es de lógica!

- Es de lógica -repitió haciéndome burla, le fulminé con la mirada y me fui -¡no! ¡Raquel, no me dejes aquí! -gritó pero no paré.

Salí de la pista bastante cansada y me senté en uno de los bancos, asegurándome de que los demás, es decir Harry y Niall, no estuvieran por allí. Ninguno de los dos me había dirigido la palabra, mejor así, que no tenía que enfrentarme a ellos.

- Así que estás bien.

Vale, definitivamente había hablado demasiado pronto. Niall se sentó a mi lado y apoyó los codos sobre las rodillas sin mirarme.

- ¿Que quieres? -le dije todo lo seria que pude.

- Solo he dicho "así que estás bien" -respondió encogiéndose de hombros.

- Ya te he oído Niall. -le contesté -¿pero a ti que más te da? ¿Y por qué no me dejas en paz de una vez? -clavé mis ojos en los suyos -¿por qué estás aquí?

El hueso de la mandíbula se le marcó en un gesto de tensión. Me exasperaba ¿que pretendía? ¿Volverme loca? No apartó sus ojos de mi intimidándome demasiado, Pero Cuando iba a levantarme para volver a la pista, tiró de mi brazo sentándome otra vez. ¡Pero será bruto! Deshice el agarre de un tirón y le fulminé con la mirada.

- ¿¡Te puedes esperar un momento!?

- ¡No me grites! -le contesté elevando el tono -¡y no! ¡No me da la gana esperarme! -volví a levantarme -¡no por ti!

Se levantó a su vez.

- ¿¡Acaso sabes que te he estado buscando toda la noche!?

Me quedé clavada en el sitio, dándole la espalda y sin atreverme a mirarle. ¿Qué acababa de decir?

- Pensaba que te había pasado algo por mi culpa.

¿Qué más le daba sí me pasaba algo? ¿Por qué se comportaba así ahora? 
El dolor en el pecho empezó a hacerse más fuerte y tuve que morderme el labio inferior para contener las lágrimas. Respiré hondo para calmarme y al final hablé.

- Pues ya ves que no, no soy tan débil como tú te crees.

Eché a andar antes de darle tiempo para que me contestara y acabara conmigo por enésima vez en tan solo cuatro días.



Liam le había dejado atrás en la carrera <¿también se le tenía que dar bien patinar?> se preguntaba Evelin agotada por el esfuerzo. Aunque merecía la pena, porque ver a Zayn como un pato mareado sobre los patines, era un espectáculo especialmente cómico. Tan digno como él siempre era, haciendo aspavientos con los brazos para mantener el equilibrio y pidiendo la ayuda de Celia, que estaba a punto de caerse al suelo de la risa, era lo más gracioso y gratificante que había visto en mucho tiempo. Por fin podía darle con un canto en los dientes, que ella tampoco era una profesional, pero no se le daba nada mal.

- ¿Echas otra Eve? -preguntó Liam que no había perdido el aliento en ningún momento.

- Depende de sí quieres que a la próxima eche los pulmones por la boca -contestó haciéndole reír.

- Tendrías que venirte a una sesión de gimnasio con nosotros, hay que estar en forma.

Esta le miró de arriba a abajo.

- Como sigas poniéndote en forma, no vas a entrar por la puerta...

- Me lo tomo como un cumplido -contestó sonriendo con esa sonrisa tan suya por la que se le cerraban los ojos, siendo la persona más adorable de este mundo.

Llegaron donde Celia intentaba hacer que Zayn se soltara de la barandilla, sin ningún éxito.

- ¡Zayn! -se quejaba ella -sí no me dejas ayudarte ¿como quieres aprender?

- No necesito esto -le contestaba él -¿para qué quiero saber patinar? Es tontería aprender algo que no vas a utilizar.

- A lo mejor un día os disfrazáis de pingüinos y hacéis el "Show sobre hielo de One Direction" -intervino Eve con una sonrisa divertida en la cara.

Zayn la fulminó con la mirada. Para burlarse de él sí que le hablaba, pero para mantener una conversación normal no. 

- Yo compraba entradas -contestó Celia. 

-  Alguien hecha una carrera? -preguntó Liam, que fue agarrado del brazo por Cel al momento.

- ¡Ya! -gritó ella echando a correr antes que Liam.

Genial, le habían dejado sola con Zayn, otra vez. Le miró un segundo para ver que él tampoco le quitaba ojo. Que genial todo, como sí no hubiese tenido suficiente con lo de ayer.

- ¿No echas una carrera? -le preguntó él al final.

- No.

Zayn suspiró ante el tono cortante de Eve. ¿Por qué tenían que ser las cosas tan difíciles? Tomar algo, una conversación, un rato agradable con ella, ¿era tanto pedir? Al final intentó un último acercamiento y le ofreció su mano. Eve le miró sin entender que pretendía ¿era eso un símbolo de paz? Porque no pensaba aceptárselo.

- No necesito tu ayuda -le contestó cruzándose de brazos.

Zayn respiró hondo un segundo sin apartar la mano.

- Pero yo sí necesito la tuya -el corazón de la chica rubia se saltó un latido y se quedó petrificada -tendré que aprender sí vamos a hacer un espectáculo sobre hielo -dijo ofreciéndole una sonrisa.

¡No! ¿Pero quién le había dado permiso para sonreír? Cuando Zayn era de esas personas que sí sonreía lo hacía porque realmente lo sentía y por eso su sonrisa era tan bonita y verdadera. No pudo no aceptarle la mano, pero sí luchó por no devolverle la sonrisa. ¿Estaba suave o solo era su imaginación? Se sentía... ¿Cálido? <¡Evelin estás loca!>.

- Pero te tienes que soltar de la valla.

Éste asintió haciendo lo que le decía. Tenía las manos frías, ¿serían sus manos así siempre o era solo por que quizás tenía frío?

- Tienes la mano helada.

- Ya, siempre están frías -contestó sin darle mayor importancia y contestando así a su pregunta.

Empezaron a dar vueltas a la pista y aunque al principio Zayn iba más bien, desequilibrado, acabó pillándole el tranquillo.

- Eh, pues no es tan difícil.

Eve sonrió inconscientemente.

- Sí es que hay que tener un poquito de paciencia -le contestó -no vas a nacer con ello aprendido.

- El problema es el método que utiliza Cel -dijo Zayn negando con la cabeza.

- ¿Cuál? -le picaba la curiosidad.

- El de "yo te empujo, y ya tu sobrevives" -hizo un gesto con la otra mano mientras hablaba y Eve se echó a reír.

Zayn la miró con una media sonrisa, debía de ser la primera vez que se reía con él. Y sí ya era guapa de normal, cuando se reía se multiplicaba por diez. Ésta se aclaró la garganta.

- ¿Te atreves a dar un giro? -le propuso.

Zayn la miró con desconfianza, sabía perfectamente que iba a acabar en el suelo, pero no quería quedar como un gallina delante de ella. Suspiró para sí mismo, no le quedaba otra que aceptar.

- Venga -contestó con resignación.

- Vale -dijo ella emocionada, le soltó la mano y se adelantó unos metros -ven hacia mí, me das las manos y hago que gires.

Este sopesó la posibilidad de retirarse, pero por una vez Evelin no estaba siendo borde con él y a lo mejor era la luz, pero hasta le brillaban los ojos azules de emoción. Asintió y se dirigió hacia ella, como le había explicado, le agarró las manos y los dos giraron, pero se había dado demasiado impulso y perdieron el equilibrio cayendo Zayn encima de Evelin.

- ¿Estás bien? -le preguntó éste con urgencia mientras la otra no podía dejar de reír.

- ¡Tienes dos pies izquierdos! -le contestó todavía medio riendo y haciéndole reír a él también.

Cuando por fin se calmaron cayeron en la cuenta de que sus rostros estaban a escasos centímetros. Lo que más les apetecía era acortar la distancia entre ambos, pero el frío hielo devolvió la cordura a Eve.

- Me aplastas -dijo antes de que la situación empeorase, ¿empeorase o mejorase?

- Ah sí, perdón -se levantó ofreciéndole una mano para ayudarla y ella la aceptó.

- Gracias -contestó sacudiéndose los vaqueros para acabar con el hielo de la pista.

- Casi que vuelvo al nivel junior ¿no? -Eve le sonrió divertida.

- Va a ser lo mejor sí, por mi propia seguridad.