Bueeeeeeenas nocheeeeeees :) Subo hoy como mi "regalo de cumpleaños" (sorry porque sea una kk de regalo) para @marinamilli99 muchisiiiiiiimas felicidades guapisima!!! espero que lo pases genial y te regalen muchas cositas!!! Un beso enorme!


CAPÍTULO 38

Llamaron al timbre y Zayn fue a abrir después de parar la partida que tenían empezada en la Play Station. A cualquier oportunidad Niall siempre intentaba hacerle trampas.

- Que no se te ocurra darle al play –le advirtió saliendo del salón.

El rubio asintió metiéndose una patata entera en la boca. Eso no podía ser natural, pensaba Zayn mientras se dirigía a la puerta. Lo último que se imaginaba al abrir era encontrarse a aquella chica rubia, cuando encima, en esas dos semanas, había aceptado que ella no sería para él. Pero ahí estaba mirándole altiva como siempre y con el ceño fruncido, todavía no había conseguido verla sin esas pequeñas arrugas de enfado entre las cejas.

- El rubio teñido está aquí ¿verdad? –preguntó entrando en la casa como Pedro por su casa, claro que Zayn le paró los pies agarrándola por el antebrazo.

- ¿Dónde crees que vas? –dijo este sin apartar sus ojos de los azules de ella.

- Estoy haciendo un favor a tu amigo Harry, así que sí no te importa –dio un tirón para que Zayn rompiera el amarre –voy a hablar con Niall. Tranquilo –añadió –que después no volveré a pisar esta casa.

Se dio la vuelta y entró al salón. Aquella última pullita le había dado justo donde dolía, él quería que la pisara todas las veces que quisiera y saltara y rodara y que hiciera lo que le viniera en gana mientras estuviera por allí. Suspiró para recomponerse y entró al salón donde estaban los otros dos.

¿Qué hacía Evelin allí? El primer pensamiento que se le vino a la cabeza es que le había pasado algo a Raquel. Pero por la cara de cabreo que ella traía seguramente solo quería una explicación. Explicación que no pensaba darle.

- ¿Se puede saber que cable se te ha cruzado para que en el cortocircuito hayas tratado así a una de mis mejores amigas?

Niall se acomodó en el sofá sin inmutarse en contestarla. Tenía que mantener su papel y aunque era lo que más odiaba en este mundo, era necesario.

- ¡Tú! –Ella se sentó a su lado y le empujó por el hombro ligeramente, sería brusco pero Niall se giró a enfrentarla -¿que que te pasa?

- Y a ti que más te da –contestó vocalizando cada palabra lentamente.

Eve miró a Zayn que contemplaba la escena cruzado de brazos y sin mover un músculo. Estaba claro que en él, no iba a encontrar ninguna ayuda. ¡Ni que fueran los caballeros de la mesa redonda, joder! Entonces se le ocurrió un plan, uno cruel, pero plan al fin y al cabo.

- ¿Tú sabes que está desaparecida desde esta mañana?

Niall la miró un momento. ¿Cómo que estaba desaparecida? Miró por la ventana dándose cuenta de que era de noche, sí no estaba en casa a estas horas... Malo.

- Pues estará con Harry. –dijo sin más.

- Lo curioso es que ha sido Harry el que me ha llamado preguntándome sí estaba conmigo –se hizo la interesante dándose toques en los labios con el dedo índice –al parecer has sido tú la última persona con la que ha hablado. 

Niall se cruzó de brazos claramente incómodo. O al menos eso es lo que pretendía aparentar, en el fondo la preocupación se lo comía por dentro. Había sido su culpa que ella saliera de allí escopeteada y sí le pasaba algo no se lo iba a perdonar nunca. ¿Dónde podía estar?

- Mira –empezó Eve –como le pase algo por tu culpa seré yo la que acabe contigo. No te lo perdono en la vida, te lo juro.

No hacía falta que lo jurase, él mismo no se lo perdonaría nunca.

- No tienes porque ponerte en plan mafiosa –intervino Zayn –además tu amiga se sabe cuidar perfectamente, ya estará en casa de otro.

Ambos le fulminaron con la mirada aunque la rubia echaba rayos por los ojos. ¿Cómo se podía ser tan capullo e insensible?

- Bueno quizás a ti te de igual –le contestó ella –porque sólo te preocupas por ti mismo, pero estoy segura de que a Niall sí le importa.

- No se sí te has enterado Evelin –arremetió el otro –pero Niall no sentía ni siente nada por ella.

El susodicho miró hacia la ventana sin añadir nada a las palabras de Zayn, estaba claro que intentaba echarle una mano, pero por dentro quería gritarle que nada de eso era verdad.

- Resulta, capullo –siguió ella haciendo hincapié en la última palabra –que no me creo nada.

- Ese no es nuestro problema –contestó Zayn.

- ¿Y tú qué? –Se giró Evelin hacia Niall -¿te ha comido la lengua el gato?

El rubio le sostuvo la mirada firme. Ya era difícil mantener la pose y mentir, pero después de que les dijera que Raquel estaba desaparecida no podía pensar en otra cosa.

- ¿La habéis llamado?

Evelin le miró con una ceja levantada, ¿de verdad le estaba preguntando eso?

- ¿Tú qué crees? –le contestó ella.

Niall se llevó una mano a la cabeza echándose el pelo hacia atrás, en un gesto nervioso.

- Mira, yo tengo un plan –empezó Evelin –Celia y yo la vamos a buscar a casa de Matt, que es el único sitio que se nos ocurre y tú vas con Harry a buscarla por los alrededores de su casa, que es donde la visteis antes de que huyera, de ti –hizo hincapié en la última parte para que él se sintiera culpable.

- ¿Yo con Harry? –Dijo Niall frunciendo el ceño –ni lo sueñes.

- Tú con Harry porque vosotros dos sois los que la habéis perdido.

- ¿Ah pero es que estamos hablando de un perro? –preguntó Zayn.

- Sí no vas a ayudar, cállate. –le dijo Evelin fulminándole con la mirada.

¿Cómo podía ser tan odioso? ¿Y por qué tenía que estar tan sumamente arrebatador con un simple pantalón de chándal gris y una camiseta negra? ¿Sería por la barbita que se había dejado? Quería lanzarse a su cuello, aunque no sabía exactamente si prefería asfixiarle con sus propias manos o comérselo a besos.

- ¿Vas a ir o no? –dijo Evelin al final recuperando la cordura.

- Vale, -contestó Niall –pero que te conste, a ti y a ella, que lo hago porque es por mi culpa que está desaparecida, pero no retiro nada de lo que he dicho.

- Que sí, que sí –le dio la razón la otra. Que le fuese con el cuento a otra porque ella no se creía una palabra.

- Bueno –Niall se levantó deseando salir de allí –voy a... –señaló hacia la puerta varias veces –buscarla...

Salió escopeteado por la puerta dejando allí a los otros dos.

El plan estaba saliendo a la perfección, pensaba Eve para sí misma, ahora Niall y Harry solucionarían las cosas y ya en otro momento les diría que no estaba perdida, que sufrieran un poquito que les iba a venir bien. Sonrió ligeramente orgullosa de sí misma hasta que se dio cuenta de que Zayn seguía mirándola de brazos cruzados. Mierda, seguía en su casa.

- Bueno pues adiós –se levantó colocando el bolso sobre su hombro y se dirigió hacia la puerta pasando al lado de Zayn.

- Adiós. –contestó este.

Antes de que cerrara la puerta, volvió a abrir encontrándose con una Evelin desconcertada.

- ¿Qué? –le dijo ella.

- No tienes coche –contestó él.

- Hay unas cosas llamadas taxis –dijo seca.

- Te va a costar un riñón esto está muy lejos... –se rascó la barba en un gesto nervioso.

- Ya me ha costado uno el venir, arriesgaré el otro –se dio la vuelta pero Zayn le agarró del antebrazo.

- Puedo acompañarte... Es de noche.

- Tú no tienes carnet –le cortó ella –como no tengas por ahí la Saeta de Fuego de Harry Potter...

Zayn sonrió, sí encima le gustaba Harry Potter, estaba perdido.

- Puedo llamar a alguien y que te acerque a donde quieras...

- Déjalo ya Zayn –le cortó acabando con todo aquello –no puedes ser un capullo insensible y luego preocuparte de que sea de noche o de mi dinero. Así que sea lo que sea lo que tu cabeza esté planeando, sí se trata de algún tipo de venganza porque nos hayamos acercado a vosotros, te aguantas. Pero no juegues conmigo, porque este tipo de juegos no me gusta.

Al susodicho le hirvió la sangre en las venas, no podía entender por qué Evelin se empeñaba en creer que él era el malo de la película.

- ¿¡Por qué no te entra en la cabeza que no tengo nada en tu contra!?

- ¡Quizás por cómo me tratas! –le contestó la chica rubia elevando el tono de voz.

- ¿¡Pero cuando te he tratado mal!? –dijo el otro claramente alterado.

Eve le miró con una ceja levantada cruzándome de brazos. La respuesta era obvia, cuando lo del partido de fútbol.

- Vale –admitió Zayn –pero ya te pedí disculpas por eso, te toca a ti perdonar.

- No quiero –dijo con la boca pequeña.

Se dio la vuelta rápidamente y salió de allí, dejando a Zayn en la puerta con cara de tonto. Sabía lo que pasaba, no confiaba en él, no la podía culpar porque tampoco es que él fuera de confiar en la gente a la mínima.



Después de casi hora y media Evelin hizo acto de presencia en casa de Cel. No sabía que había estado haciendo pero desde luego, lo que fuera le había hecho entristecer. Sonrió ligeramente al entrar en la habitación, donde ya habíamos juntado dos colchones para las tres. Teníamos palomitas, Skittles y M&M's. Todo listo y preparado para darnos una buena maratón de Harry Potter. Sí, se tenía que llamar Harry. 

- ¿Dónde estabas? -le pregunté cuando dejó su bolsa de equipaje en el suelo con un suspiro.

- Digamos que... He sembrado el caos entre dos personas.

Cel y yo nos miramos sin entender una palabra. Sí Eve había "sembrado caos" nada bueno podría salir de ahí. Malo, malo. Y no sabía por qué, pero me olía a que era algo que implicaba a los chicos. ¿Qué habría hecho esta vez? Negué con la cabeza, casi que preferiría no saberlo por ahora.

- Dejemos todo a un lado, hoy es noche de chicas, de comer guarrerías, gochas y ver Harry Potter -dijo Celia acabando con el tema -así que venga, Eve ponte el pijama y apaga las luces. Yo voy conectando el ordenador a la tele.

Cada una se puso a lo suyo y No pude evitar mirar el teléfono, aunque lo había puesto en silencio y sin vibración, las llamadas perdidas de Harry seguían rondando por mi mente. Estaría preocupado... y no me estaba comportando de forma madura. Al menos se merecía una explicación, aunque seguía sin saber que decirle. Suspiré cansada de todo eso. Seguro que acababa enfadado, aunque eso no me disgustaba tanto, ya que de esa forma no tendría que enfrentarme más a él.