Capítulo 31. #EDC. Incómodo.

-Ah... -dijo él incómodo. Así fue también el silencio que le siguió, hasta que decidimos irnos a dormir de una vez. Ya eran las cinco y media de la madrugada. 

Esta vez, aunque me quedé pensando en ese maravilloso beso, me dormí rápido. Supongo que no daba más. 


Narra Justin

Me quedé pensando. Había hecho mal, nuevamente. Había engañado a mi novia, y si había hecho eso, evidentemente no sentía nada por Vanessa. Mañana mismo, cueste lo que cueste, la dejaría.


Me levanté pesadamente y me encontré con mamá en la puerta, la causa de que me despierte. 

-Justin... ya es la una y media del mediodía, ¿hasta qué hora se quedaron? 

El uso del plural me llamó la atención y me giré para ver si _____ (tn) seguía ahí. Sí, dormía mirando hacia mí, tapada hasta los hombros. 

-Llamando a Justin... -jugó mamá, la miré y rió.- Su mamá ya está acá -se recargó en la puerta y sonrió con dulzura.

-Oh... ¿ya se van? -sacudió la cabeza

-Se quedan a almorzar. En media hora la comida está lista. Levantense, ¿sí? 

Asentí y en cuanto se fue, me acerqué a la cama y desperté cuidadosamente a _____ (tn). Ella abrió los ojos, soltó un suspiro que sonó más como un gemido, me miró y se volteó hacia el otro lado, haciéndome reír bobamente.

-Nena... tu mamá está acá -dije sacudiéndola suavemente por la cintura. Ella volteó perezosamente a verme, y sonrió. 

-No me digas así -dijo, estirándose, haciendo que su voz saliese distorsionada. Luego se relajó sobre la cama y se me quedó mirándome. Sonrió. 

-Vamos -la imité

Me puse una remera y bajé junto a _____ (tn). Saludamos a su mamá, y nos sentamos en la mesa. Mamá había hecho spaguetti. Fue algo incómodo al principio, pero nada lo superó cuando salió el tema de que _____ (tn) se iría a vivir con su padre. Ella ni siquiera me miró en ese momento. Pero mamá sí lo hizo y estoy seguro de que entendió mi intención.

Apenas se fueron, llamé a Vanessa y le dije que tenía algo que decirle. Nos encontraríamos a las cuatro en un bar cerca de su casa. Eran ya las tres, por lo que me bañé, mientras pensaba cómo se lo diría, pero finalmente decidí que sería como salga en el momento, para no ponerme más nervioso. 

Eran las tres y veinte y ya estaba totalmente listo, por lo que me preparé para el concurso de esta noche. Era domingo, tenía que ir al show nuevamente. Presentaría "Nothing like us", la canción que toqué anoche para _____ (tn).


Narra _____ (tn)

Llegué a casa y puse mi celular, que no tenía batería, a cargar. En cuanto lo prendí, este sono como diez veces. Una perdida de Chris, una de mamá, una de Miley y dos mensajes, uno de Chris y otro de Chaz. Ambos preguntaban de alguna forma si estaba bien. Les respondí y agradecí, y llamé a Cait.

-Uh, se despertó la Bella Durmiente -bromeó al atender

-La gente normal dice "hola" -sonreí. Su energía era contagiosa.

-¿Quién te dijo que soy normal? 

-Bueno, no importa.

-Mmm... lo que importa es lo que pasó ayer, contame todo.

-Mucho para contar por teléfono. ¿Salimos a algún lado? 

-Bueno, vamos a... caminar por ahí -propuso-. A las nueve es el concurso de Justin, ¿vas a ir? 

-No sé, no me invitó. 

-A mí tampoco -rió-. No significa que no podamos ir. Además, ni hace falta preguntarle, siempre vamos cuando queremos. Chris viene también. 

-Está bien. Voy a buscar qué ponerme para ahora, y ya le pregunto a mamá, ¿sí?

-Bien, ¿a las cuatro? 

-Cuatro. Adiós

-Chau, nos vemos


Le pregunté a mamá por lo de esta noche y, al tener más confianza con Pattie, sorprendentemente me dejó ir. También me informó que, hablando de ella, los Beadles darían una fiesta hoy y Pattie le pasó el mensaje, para que nos integremos un poco con el vecindario. Genial. Después de ver a Justin, todos a la fiesta. Sería un buen fin de semana.

Me bañé y cambié { http://www.polyvore.com/cgi/set?id=91369027&.locale=es } para salir con Cait. A las cuatro, nos encontramos en la plaza cerca de casa y comenzamos a caminar hacia el centro, a medida que le contaba todo lo sucedido. 

-Vos me estás jodiendo... -me dijo, en tono divertido.

-No... ahora definitivamente quiero irme, dejar atrás todos los errores que cometí. Fueron uno tras otro. -Me lamenté.

-Ya fue... tomalo como una experiencia. Por lo menos te diste cuenta que no hiciste bien. De todas formas, sé que te encantó ese beso -sonrió pícara, y me contagió la sonrisa, aunque la mía fue mucho más amplia, recordando lo sucedido -. ¿Qué se sintió?

-Fue increíble... me di cuenta que me pasa algo con él. Nunca di un beso tan sincero en mi vida. 

-¿Y él qué dijo?

-Al final me dijo el "te quiero" más hermoso del planeta. -Sonreí estúpidamente, y luego la borré. 

-¡Qué tierno! -exclamó emocionada.- ¿Qué es lo que te molestó, entonces?

-Que él tiene novia, Cait, no me parece que sea correcto que siquiera se le haya ocurrido la idea de besarme, y menos todavía, hacerlo.

-Es obvio que no quiere a Vanessa. Hasta él mismo, en el fondo, lo sabe. Sólo que no quiere darse cuenta. Necesita olvidarse de algunas cosas y... pareciera que no sabe cómo.

Y ahí vuelve la intriga de esta historia. ¿Olvidarse de qué cosas? Parece que siempre me entero de la mitad.

Caminábamos por Roll Street, cuando creí ver a Vanessa en un bar. Como estábamos en la vereda de en frente, no lograba ver con quién estaba, aunque Cait aseguró que era Justin.

-Quedémonos a ver qué pasa -dijo ella.

-¿Estás loca? -pregunté retóricamente- ¿Y si nos ven? -ella se encogió de hombros- No, ni se te ocurra, vamos a otro lado.

-¡_____ (tn)! No seas nena. ¡No nos van a ver!

-Oh, está bien. -Dije con un pequeño quejido.- Pero sentémonos lejos.

-Bien -sonrió.

Fuimos a unas cuatro mesas detrás de ellos, de espaldas a Justin. Cait, que los podía ver perfectamente, afirmó que Vanessa no estaba de humor. El mesero nos interrumpió. Al principio no presté atención, pero luego me di cuenta quién era.


"Ojos cafés, cabello oscuro en punta, algo despeinado. Sonrisa de lado, matadora, totalmente. Lindo cuerpo, una espalda formada y un andar con arrogancia: se hacía notar."


Cait me miró por un segundo y luego le sonrió a Juan. 

-¡Hey! ¿Cómo estás?

-Cait, ¿todo bien? -la saludó con un beso y luego hizo lo mismo conmigo. Casi me desmayo en ese instante. Era el chico que iba con nosotras al colegio, ese que vi en Starbucks con los chicos y me choqué al salir con Chris. Claro, si Chris lo conocía, de seguro que Cait también. 

-Bueno, ¿qué les traigo, chicas? -dijo, preparado para anotar en una pequeña libreta. Me miró y al instante miré a Cait. Ya sabía que me había puesto roja, y no me sorprendía. 

-¿Qué tal unos batidos? -me preguntó ella.

Asentí. 

-Yo uno de frutilla y banana -dije.

-Yo igual.

-Bien... -anotó- ¿algo más? 

-Nada más. -Sonrió mi amiga.

-Enseguida los traigo -Juan sonrió de lado y se fue. 

Unos segundos después, me acurruqué en mis brazos, aguantando mi pequeño grito. Ese chico me podía bastante. Definitivamente, él sabía conquistar. Y eso que no había hecho nada.

-¿Qué hace acá? -dije, llena de emoción. Vi la cara de Cait, riendo ante mi expresión.

-Seguro trabaja acá -se encogió de hombros.

-¡Ay! No lo puedo creer. 

Justo en ese momento, él llegó con una bandeja y nos dejó un batido a cada una. En cuanto dejó uno en frente mío, me miró y sonrió. De seguro había escuchado lo que había dicho. No quise ni imaginar lo roja que estaba en ese momento.

<<Tierra, trágame.>>
...

Hollla, perdón por no subir antes :( espero que les guste, besosss ♥♥♥