Ningún pecado que una persona comete incorpora más peligros, problemas y destrucción que el pecado sexual. Se han roto más matrimonios, destrozado más hogares, causado más dolor y enfermedad, y destruido más vidas que el alcohol y las drogas combinados. Provoca mentiras, robos, engaños y asesinatos, así como amargura, odio, calumnias, chismes y falta de perdón.

JOHN MACARTHUR