Siguiente capítulo :) Capítulo 10 #Narra Lucía Antes de decir nada todos sabíamos lo que había que hacer: correr. Sentí la mano de Liam agarrando la mía y tirando de ella. No dudé en seguirle. Bajamos tres pisos por las escaleras, nos metimos por una salida de emergencia, recorrimos un gran pasillo y entramos en una habitación pequeña. Me senté en el suelo intentado recobrar el aliento. - Creo que por ahora aquí estamos seguros - Dijo Liam casi sin aire, sentado a mi lado - ¿Qué hacían esas fans aquí? Se supone que no pueden entrar - Pregunté alterada - Si, se supone - Contestó - ¿Qué ha pasado con tus amigas? - Ni idea, voy a ver si puedo llamarlas. Eso si no se me ha caído el móvil por el camino - Dije mientras sacaba mi Blackberry del bolso. Marqué el primer numero que encontré en mi lista de contactos - ¿Bea? - ¿Qué? ¡No te escucho! - Gritó. Se oían a muchas fans por detrás. - ¿Dónde estas? - Dije hablando más alto - ¡No se lo que dices, pero estoy con Louis debajo del mostrador de recepción! - Contestó sin escucharme. Antes de que cortara la llamada escuché un ruido muy sospechoso. - Bea está en recepción con Louis, así que estas cuando se vayan las fans - Informé - Genial, las otras - Ordenó mientras echaba un vistazo al lugar. Llamé a Marina. - ¡Lucía! Ahora mismo iba a llamarte. Estoy en la lavandería con Zayn. Por aquí no hay muchas fans, pero no nos vamos a arriesgar. Por cierto, luego te llamo que Zayn se está poniendo ropa rara y está muy… guapo. Voy a colgar. Y antes de que dijera nada ya no había línea. Me pareció raro que lo de “guapo” lo dijera en alto, pero me causó risa. Siguiente, Inma. - Voy a ser breve. Dime donde estas - Dije - Vale, estoy en los baños de la planta baja. Y Harry no deja de echarme agua, ¡para! - Gritó sin dirigirse a mi. Colgué antes de que lo hiciera ella. - Ya solo queda María, por cierto, ¿Dónde estamos? - Pregunté curiosa - En el armario de las toallas - Contestó Liam cogiendo algunas y apilándolas en el estante - Interesante - Dijo cogiendo una y abriéndola. Puse los ojos en blanco y cogí el móvil para llamar a María, pero ella se me adelantó. - ¿Lucía?¿Dónde estas? - Preguntó - Estoy en un armario, en el de las toallas - ¿Estas sola? - No, estoy con Liam - Contesté mirándole - ¿Dónde te has metido? - Estoy en el armario de la limpieza con Niall, ¿sabes algo de las chicas? - Si, Bea está con Louis escondidos en recepción. Nos avisaran cuando las fans se vayan del hotel. Inma y Harry están en el baño de la planta baja y Marina y Zayn en la lavandería - Informé - Gracias por la información, detective Lucía - Dijo entre risas. - ¿María, estas nerviosa? - Susurré - No, no, no para nada - Dijo poniéndose a la defensiva. - Luego me cuentas - No me dio tiempo a colgar porque Liam me abrazó por detrás, me quitó el móvil y me tapó la boca con su mano. Sentía su respiración en mi nuca y eso me ponía nerviosa. Le miré extrañada y me indicó que escuchara. Percibí unas voces que venían del exterior. - ¡Si, acabo de escuchar a alguien en este armario! - Aseguró una voz chillona. Liam me indicó un montón de toallas que había en una esquina. Entendí su plan. Cuidadosamente apartamos las toallas, nos sentamos y volvimos a colocarlas por encima nuestras. Acto seguido la puerta del armario se abrió. Escuché voces, pero no duraron mucho al creer que allí no había nadie. Cuando desaparecieron me di cuenta de lo cerca que estaba de Liam. Nuestras narices casi se rozaban y, por primera vez, lo miré directamente a los ojos. Eran marrones, marrones pero tan bonitos como los azules o verdes. Me empecé a poner nerviosa . Rápidamente me quité el montón de toallas de encima, necesitaba salir de allí. Eso se convirtió en un momento incómodo. No hablamos hablamos hasta que nos dimos cuenta de que tendríamos que pasar la noche allí. Hacía frió. Empecé a temblar y Liam se dio cuenta. -Toma estas toallas, te mantendrán caliente - Dijo pasándome dos - Yo cogeré otras. Tenía sueño, así que agradecí que Liam se recostara a mi lado. Me dejó poner la cabeza en su hombro. Lo ultimo que recuerdo es la suave voz de Liam susurrándome: “Buenas noches, princesa”