¡Hola! Aquí vengo con el primer capítulo de la novela de @MiniJamesHoran y mia. Nos ha costado horrores pensar el título y este capitulo es un poco corto y aburrido, pero es la introduccion. María me ha dicho que hay bastantes personas a las que avisar, y eso me alegra. 


Capítulo 1

#Narra María

Otro viaje de negocios de papá en verano. Lo bueno es que era en París, concretamente en Disneyland. Otra parte buena era que como me había graduado en el instituto londinense con muy buena nota me permitía llevar a mis amigas y también compañeras de instituto: Lucía, con la que vivía compartiendo casa era pelirroja, de ojos oscuros y siempre vestía con sus converse y su sudadera; Marina era mi vecina, muy agradable, pelo negro, ojos marrones y dependiendo del día iba arreglada; Inma era también mi vecina, pues ya que éramos cinco teníamos que repartirnos entre dos casas contiguas, pelo moreno ojos marrones y siempre muy arreglada; por último, Bea que compartía piso con Inma y Marina tenía el pelo castaño y los ojos azules y gustaba de ir arreglada.

Después de un largo e interminable viaje llegamos a Disneyland, ya que nos quedábamos en uno de los grandes hoteles de dentro. Era todo fantástico y enorme, cada una tenía su propia suite, ya que mi padre era uno de los grandes jefes de las empresas.
No podía esperar a llegar a la habitación, así que subí por las escaleras.
-¡María, todas nuestras habitaciones están juntas! ¡Tu padre es increíble! – Dijo Marina tan entusiasmada como yo
- No me lo puedo creer – Vi un gran colchón en medio de la habitación, enorme, mas enorme que mi propio cuarto en la ciudad de Londres.
- ¡Chicas, voy a darme una ducha, en seguida vuelvo! – Dije gritando a voces por todo el pasillo
- ¡Vale, pero no hace falta que grites! – Me contestó Inma

Ni ducha, ni leches, fui directa al gran jacuzzi que había en la gran habitación. Cogí mi iPod y escuché música mientras el agua de la gigante bañera me daba un masaje. Escuchaba Take Me Home, de One Direction, nuestros grandes ídolos desde hace ya un año ¿Cómo podían ser tan increíblemente perfectos?
Pasó casi una hora hasta que decidí salir del jacuzzi, más arrugada que una pasa. Cogí mi toalla y la enrollé por mi cuerpo. 
Escuché un crujido en la puerta. Alguien entró en mi habitación. Recogí mi pelo rubio en una toalla y salí corriendo del baño.
- ¡Aaah! – Grité
-  Perdón, lo siento mucho – Dijo la figura borrosa de un chico rubio, no llevaba las lentillas, así que no lo reconocía bien
- ¿Quién eres? – Dije asustada
- Me llamo… Niall Horan – Dijo con la voz apagada y a la vez avergonzado por haber entrado en la habitación equivocada.
- No puede ser, ¡eres tú! – Sentía una gran fuerza presionando mi cuerpo hacia el suelo. Hasta que caí.