Maratón 1/2.


»Misión para siempre.
Capitulo 88.



— Mi.. mi.. mi.. bebe —Solloza _____ temblorosamente, en los brazos de Justin. Él la aprieta mucho más en su pecho y lloran juntos. 
Brad lo había contratado para cuidar a su hija, porque era un buen guardaespaldas. ¿Pero él era un buen guardaespaldas, después de todo? Mientras el la cuidaba, a ella la habían secuestrado y violado. Después, había matado a sus padres y ahora, esto. ¿Cómo demonios seguía cuidándola, si era un bueno para nada? Se odiaba, en estos momentos solo sentía dolor.. no merecía vivir.
— Todo esto es mi culpa, solo mi culpa —Susurra el, ella niega con la cabeza y se separa un poco del cuerpo de Justin y limpia algunas lágrimas de su mejilla.
— Quiero a mi bebe de vuelta Justin —Insiste ella, sus manos tiemblan. Acaricia el brazo de él, encima de aquella herida que ahora está vendada. ¿Porque las cosas eran así de difíciles? Odiaba su vida. Odiaba ser ella. Solo pedía algo bueno en su maldita vida. ¡Quería ser feliz! Maldita vida, malditos todos.
— No sirvo para nada.. no puedo ayudar —Se atraganta entre lágrimas, ella niega con la cabeza y se hunde esta vez en su cuello— Tu papá se equivocó conmigo. No se cuidar de ti, ni siquiera de mis hijos. Merezco que el reviva y me mate por ser un imbécil que no cumplí con su misión..
Ella no dice nada y se queda en silencio, derramando más lágrimas.
Su vida era una desgracia.. pero no podía culpar a Justin.. él había hecho todo lo que podía.. a pesar de todo, el seguía allí con ella. Era lo que ahora mismo contaba.
— Iré a ver a Drew —Habla el, ella asiente y se separan. Lo observa.
— Él está mal —Murmura, tragando saliva. Justin asiente totalmente dolido— No.. no le hagas tanto caso.. el.. ahora.. no..
— Lo sé, él no quiere verme porque tengo la culpa de todo —Termina la frase. Ella aprieta sus parpados y de nuevo se queda en silencio. No sabía qué demonios decir. Solo sabía que quería a su hija junto a ella. No importa si tenía que dar su vida, a fin de cuentas, Justin podía cuidar de ella.

Justin entra a la habitación de Drew, donde está acompañado de Ana y Zac, ellos le dedican una cálida sonrisa y se levantan de la cama.
— Ey bro.. —Susurra Zac— Todo saldrá bien, ya verás.
— No sirvo para nada Zac —Dice totalmente apenado, sintiendo vergüenza de ser un guardaespaldas de alto rango el cual no pudo cuidar de su hija.
— No digas eso Justin, eres el mejor. No se trata de cumplir todo perfecto. Se trata de saber sacar adelante. Tranquilo, sabes que contaras conmigo para todo —Justin asiente y se deja abraza por Zac, hundiendo su rostro en más lágrimas sobre el hombro de su amigo. Se sentía como una mierda. O él era la mierda. 
— Gracias Zac, pero sigo pensando que no sirvo para nada —Zac humedece sus labios. Jamás había visto a Justin así.. todo su autoestima estaba destruido.
— Justin no digas tontadas, eres perfecto —Interviene Ana, mirándolo apenada— Lo siento Zac, pero tenía que decirlo —Él le dedica una sonrisa burlona y vuelve hacia Justin. Quien ni se inmuto. Esto empezaba a matarlo, era de cualquier manera doloroso verlo tan destruido.
— ¿Podrían dejarme con Drew unos minutos..? —Pregunta Justin, los dos asienten y antes de irse besan la frente de Drew, diciéndole que todo iba a estar bien. Que su hermana estaría de vuelta en menos de lo que se esperaba.
Cuando quedan solos, Justin camina lentamente hacia la cama de Drew, donde esta acostado, entre miles de almohadas y tapado.
— Drew.. —Murmura Justin, al verlo. Sus ojos están cristalizados a punto de soltar lágrimas. Se siente aún más peor al verlo así, merecía morir.. eso era lo que merecía.
— Vete —Dice con la voz quebrada, mirando a su padre con rencor— ¡Vete! ¡No te quiero!
Justin solloza y se sienta en la cama. Drew se mueve hacia atrás, no queriendo estar cerca de él. Repeliendo el contacto con su padre, estaba demasiado decepcionado.
— Lo siento tanto Drew —Musita después mira tristemente a su hijo quien lo mira con rencor. No había peor dolor que tu hijo te rechace— Sé que cometí un error, pero.. quiero arreglarlo ¿Sabes? jamás quise que esto pasara..
— Todo es tu culpa. Por eso mi hermanita ya no está —Habla temblorosamente— Ya no te quiero.. no eres mi papi.
— No digas eso Drew —Replica Justin, limpiando sus lágrimas. Se acerca a su hijo y toca su mejilla. Drew aleja la mano de su padre y sale de la cama, evitando cualquier contacto físico con él.
— Vete.. no te quiero —Vuelve a repetirle por tercera vez. Justin asiente débilmente y se levanta de la cama, y antes de salir se voltea para ver a su hijo.
— No sabes cómo lo siento Drew, no sirvo para nada.
Y sale de la habitación, aun peor de cómo estaba. Sentía sus lágrimas ahogarlo. Todo era una mierda, jamás debió llegar a la vida de _____. Gracias a él, todo estaba arruinado.

Scooter carraspea, llamando la atención de Justin, quien levanta el rostro levemente para obsérvalo. 
— ¿Sucede algo? —Pregunta bajamente, Scooter asiente. 
— Creo que todo está fuera de control. Sé que esto ha llegado lejos, me siento mal en cierta forma porque no estamos cumpliendo, Gregory siempre está a 10 pasos sobre nosotros.
— No es su culpa Scooter, es la mía. Simplemente no sirvo como guardaespaldas  —Musita— Soy un asco.. no sé qué va pasar, ni siquiera creo poder rescatar a mi hija..
— No digas idioteces Justin, eres uno de los mejores —Le contradice, Justin ríe amargamente y hecha los mocos.
— ¿Tú crees que soy uno de los mejores? _____ ha sido secuestrada, violada, ha visto a sus padres morir frente a sus ojos, mataron a nuestro bebe, secuestraron a nuestra hija siendo yo su guardaespaldas ¿Seguro que soy bueno? —Scooter se queda el silencio, escuchando aquellas palabras. Jamás lo había visto así.
— Justin, no te culpes por nada. Ella no te culpa, todo va estar bien —Dice, queriendo levantar su ánimo. Cosa que no pasa.
— Pues Drew si lo hace —Masculla, sintiéndose odio a él mismo. Quería morir, morir.
— Jamás Justin.. —Replica Scooter— Te había visto así. Y me duele, joder. No pienses así, haz pasado por muchas cosas.. tienes que ser fuerte, como siempre.
— Scooter, perdí a un hijo.. a mi primer hijo —Murmura y suelta varias lágrimas. Sorprendiendo a los presentes— Mi hija.. joder.. ella está en sus manos. ¿Cómo mierda quieres que piense acerca de mí, de mi capacidad? ¡No sirvo para nada Scooter!
— No es el mejor momento para que estés así —Lo regaña, sintiéndose impotente al no poder hacerlo sentir mejor— ¡Vas a hacer lo posible para recuperar a tu hija! Sí o sí. Me vale una mierda tu puta negatividad, vas a trabajar en esto y la vas a tener aquí y al fin serán felices.
— La felicidad no existe —Finaliza el, poniéndose de pie.
Todos lo observan irse a su habitación. Justin jamás había sido así.. él siempre había estado orgulloso de lo que lograba y salía adelante, pero ahora estaba destruido.
Pero.. para que el arcoíris salga, primero debe acabar la lluvia.











Les subí otro capitulo más --->