{Amor Egoísta}
Capítulo 2
—Oh que pena, no sé porque vomité.
—La verdad que raro, ¿algo no te cayó mal? ¿ya te sientes mejor?.
—Pues la verdad, no... quisiera ir a casa y recostarme un poco.
—Claro, no puedes caminar, pediré un taxi.
Enrollo un brazo por su cuello y el grita con fuerza: —TAXI— unos minutos después uno se para deltante de nosotros y me sube con cuidado.
—¿A dónde los llevo?—pregunta el taxista.
—De vuelta a la derecha porfavor, yo le diré por donde irse—indica Niall.
—¿No será mejor que me de la dirección de su casa?.
—Vamos amor—le dije un poco apagada.
—San Rafael #456.
El taxista manejó, me sentía debil... muy mareada y tenía calor, estaba sudando me sentía muy mal.
Habíamos llegado, Niall me bajo con cuidado y me colocó en la cama, y le pagó al taxista.
—¿Estás mejor?—se quita su chaqueta negra de cuero.
—Un poco—digo dando vueltas a la almohada.
—¿Quieres agua?—me pregunta sentandose en la esquina de la cama, tocó mi pie.
—Un poquito, deseguro me sentiré mejor mañana, ahora quiero dormir.
—Deja te...—lo interrumpo levantándome de la cama—¿a dónde vas Ali?—preguntó.
—Al baño....me lavaré los dientes.
—¿Por qué mejor no te duermes?.
—No, me lavaré los dientes.
—¿Quieres ayuda?—se levanta ápido de la silla.
—No gracias—me metí al baño asustada.
Me recargo sobre la puerta, suspiré y me siento sobre la tapa del escusado, lo pienso y no... no, no puede ser, espero unos minutos de silencio para relajarme.
—Allison—Niall toca la puerta.
—¿Sí?—digo.
—Saldré por un momento, regreso en unas dos horas si te sientes mal solo habláme al celular ¿ok?.
—No te preocupes por mi, ya me estoy sientiendo un poco mejor—miento.
—¿Segura? 
—Si.
—Bueno si te sientes mal solo me hablas ¿está bien?
—ok.
—Te quiero.
—Yo igual a ti.
Ya no escucho más de sus palabras y escucho como la puerta de la entrada se abre y luego se cierra, salgo rápido del baño, tomo mi bolso, mi sudadera, mis zapatos y un poco de dinero que está guardado en la lata vieja de atún hasta el fondo de la cama, solo tomo lo necesario. Espero unos minutos para hacer tiempo, solo iría a la tienda que estaba a la otra cuadra para comprar lo que quería.
Salí de la casa, caminé y caminé, me dio un poco de frío y me cruzo de brazos pienso lo posible que puede pasar pero un 50 % me decía que si y un 30 % que no, estaba muy confundida, así soy yo ¿qué más puedo pedir?.
—Hola Allison—alguien interrumpé mis pensamientos.
—Hola Zayn—un amigo de Niall, moreno de ojos cafés, muy pero muy hermosos, cabello negro y largo, tiene varios tatuajes en su cuerpo, tenía un cigarrillo en su boca.
—¿Qué andas haciendo? ¿dónde está tu hombre? que milagro que no estás con él.
Me hecho a reír y paso un mechón de mi cabello por detrás de mi oreja. —Tú sabes, me siento un poco mal y quise tomar aire fresco—le digo alejándome poco a poco.
—Ah, ¿y él? ¿Está en casa?—pregunta acercándose a mi lentamente.
—No.
—¿Dónde está?—vuelve a preguntar y el humo que sale de su boca lo hecha al otro lado.
—Pues…—miro el humo— salió,no sabría a donde solo me dijo que estaría fuera unas 2 horas.
—Oh.
Ambos nos quedamos callados. 
—Que bien—dice para el mismo.
—Si, bueno…ya me tengo que ir.
—¿A dónde vas?.
—Iré a la farmacia.
—¿Quieres que te acompañe?—preguntó.
—No gracias.
—Quiero una nueva caja de cigarrillos.
—Oh dios—saqué unos de mi bolsillo—ten—se los extiendo.
—¿Por qué tienes tu?—los agarra.
—Son de Niall.
—¿No se enojará?.
—No, si le digo que los tiré pues… 
—No, ten—me los regresa.
—¿No los quieres? No me gusta que el fume.
—Ambos lo hacen.
—Lo hacía, yo lo hacía.
—Bueno… “hacías”—agrega comillas con sus dedos.
—Agh, mejor me voy antes de que se haga más noche, a Niall no le gusta que esté tan noche en calle.
—Por eso te digo… ¿no quieres que te acompañe?.
—No muchas gracias, en serio… estoy bien así.
—Vamos deja te acompaño—me dice otra vez, terco.
—Que no.
—¿Por qué no quieres?— acerca a mi y me toma de la cintura.
— Suéltame por favor.
—No, me gustas mucho—me acerca más a él.
—¿Y tu novia?—trato de voltear la cara para no tener el humo del cigarro en ella, lo empujo del pecho.
—Tu estás más bonita, siempre envidié a Niall por conseguirse a una novia así—me acerca aún más.
—Que te quites, ¿no entiendes?—lo empujo con más fuerza, su espalda golpea con la pared de ladrillos donde estaba recargado.
—Ok como quieras.
—¿por qué no me puedes dejar en paz de una vez? entiende.. al que quiero es a Niall.
—Esa noche no parecía.
—¿Qué? ¿de qué hablas Zayn?—frunco el ceño algo confundida.
El comienza a reír, rasca su oreja y dice: —¿no lo recuerdas?—
—No se de lo que estás hablando.
—No puede ser que no lo recuerdes.
—No, yo no recuerdo tus fantasías conmigo, me da asco de solo pensarlo.
—¿por qué? eres hermosa.
—Le diré a Niall.
—¿Qué me puede hacer ese?.
Suspiro molesta y me doy la vuelta, el sigue riendo sin descaro.
—¡ADIÓS!—grita, me volteo y le levanto el dedo del medio.
Lo dejo atrás y llego a la farmacia, —Hola—saludo a la mujer que estaba atrás del mostrador.
—Hola hija—me saluda.
Busco lo que quiero, por todos los pasillos y no lo encuentro, solo era cosa de seguir buscando.
—Disculpe…—le dije a la señorita amable y de peinado gracioso.
—¿Si?—preguntó.
—No tiene…..—trago saliva—pruebas de …
Ella me mira con una mirada de espanto, me interrumpe y dice: —¿qué edad tienes?—
—18—contesté.
—Sí, por… aquí.
—Gracias—la seguí y moví mis dedos nerviosa.
—Aquí tienes—me dice.
—Gracias—voy hasta el mostrador para pagar.
Compro mi producto y voy hasta casa, entré escondiendo lo que había comprado: —¿Niall?—grito para asegurar que no ha llegado.
Al parecer estaba sola en la casa, el todavía no a llegado. Me metí rápido al baño y esperé los minutos restantes.
—¿LINDA?—gritó Niall, cerré rápido la puerta del baño con seguro y metí hasta el fondo mi producto comprado.
—¿Sí?—le grito desde el baño y abro la puerta, escondo la prueba en mi bolsillo trasero.
—Hola—me saluda—¿te sientes mejor?—me aserca a él.
—Un poco—me besa el cabello.
—Que bueno, te traje una ensalada ¿Está bien?—me dice.
—Vi a Zayn—le dije cambiando de tema.
—¿Sí? ¿y luego?—dice sacando los cubiertos.
—preguntó por ti.
—¿Y qué le dijiste?.
—Lo mismo de siempre.
—¿De milgaro no estaba con una chica verdad?.
—No, estaba solo.
Niall se quedó callado y me pasó un vaso de coca-cola.
—¿Qué tanto compraste?—le pregunto.
—Comida, pensé que querías comer.
—Tengo un poco de hambre ahora que lo dices.
—Que bueno, traje papas fritas y dos hamburguesas y tu ensalada.
—Gracias, iré al baño—le digo.
—Está bien, iré acomodando las cosas y aquí te espero—me anunció con una gran sonrisa en su rostro.
Me meto al baño y saco la prueba, estaba nerviosa pero bueno ¿qué podía salir?. Se me cae de las manos, comienzo a llorar y me miro al espejo, levanto la prueba y… si, estaba….embarazada. ¿embarazada yo? eso… no podía ser posible, no, no no…. pero ¿Cómo?, repaso toodo en mi mente ¿Cómo pasó todo esto tan rápido? ¿Cómo? quiero mi vida de vuelta.