CAPÍTULO 61 - Miré hacia todos lados pero nada, no se les veía por ninguna parte. -Debo irme ya – dijo Janet mirando al suelo con tristeza. -Espera cinco minutos más, quizá han pillado atasco o algo así – dije yo intentando retenerla un rato más. -No Niall, no van a venir. Inés no quiere ni verme y supongo que Harry se habrá quedado con ella para no dejarla sola. Yo también creía que no iban a presentarse pero aún guardaba una pequeña esperanza. Sabía lo que Janet significaba para Inés y se me hacía difícil creer que no quisiera ni siquiera despedirse. -Les llamo por última vez – dijo Zayn – si no me lo cogen vete ya porque hace rato que están avisando a los pasajeros de tu vuelo por megafonía. Janet asintió y Zayn marcó el número de Harry y se llevó el móvil a la oreja. Al cabo de unos segundos negó con la cabeza y lanzando un suspiro dijo: -Nada, siguen sin cogerlo. -Pues me voy – dijo Janet cogiendo su maleta y dándonos dos besos a todos – un placer haberos conocido y muchas gracias por todo. Espero que no me guardéis rencor. -Para nada – dije yo sonriendo. -Gracias Niall, me has ayudado muchísimo estos últimos días. Si algún día vuelves por Irlanda ya nos veremos. -Claro que sí. -En fin – nos miró a todos sonriendo - adiós, hasta otra! Empezó a andar por el pasillo que teníamos enfrente. Cuando la perdimos de vista volví a echar un vistazo por los alrededores por si llegaban en el último momento pero ni rastro de ninguno de los dos. NARRA JANET Facturé la maleta, pasé por el detector de metales y me dirigí a la puerta por la que salía mi avión. Al llegar allí vi una cola enorme. Me acerqué a unos ancianos que había al final de la cola y les pregunté: -Qué pasa aquí? -Pues no lo sé bonita, parece ser que ha fallado algo del avión y que lo están arreglando. -Vaya, sabe si van a tardar mucho? -Una señora que ha salido hace un rato a avisarnos ha dicho que va para largo. -Y no nos pueden asignar otro vuelo? -Que tienes prisa? -Bueno no, pero estoy cansada y me gustaría llegar a casa en cuanto antes. -Vaya… bueno si quieres siéntate por allí y descansa – señaló unos bancos que había a la derecha – en cuanto nos llamen te avisamos. -Muchísimas gracias señora. -De nada bonita. Le sonreí amablemente y fui a sentarme donde me había indicado. Cerré los ojos intentando calmarme y no pude evitar derramar una pequeña lágrima al pensar que, ahora ya sí, había perdido a Inés para siempre. NARRA HARRY Al fin llegamos al aeropuerto. Aparqué el coche e Inés salió de inmediato. -Así que quieres venir conmigo a despedirte? – pregunté. -Sí, no sé si voy a perdonarla pero necesito despedirme de ella. No puedo dejar que se vaya así. Le sonreí y enseguida nos pusimos a andar. -Crees que llegamos? – preguntó. -No lo sé, pasan cinco minutos de la hora que me dijeron… - dije acelerando el paso y cogiendo a Inés de la mano para que no se quedara atrás. Al parecer unas chicas me reconocieron y vinieron corriendo hacia mí. -Lo siento chicas, tengo muchísima prisa, si os esperáis unos minutos os firmaré autógrafos y me haré fotos con todas, pero por favor, ahora no. -Pero… - empezó a decir una de ellas. -Si os esperáis aquí os juro por mi vida que en cuanto termine de hacer lo que tengo que hacer, vengo. Gracias a dios la idea pareció gustarles porque pegaron un pequeño gritito y se pararon dejándonos avanzar tranquilamente. -Vas a volver cómo les has dicho? – preguntó Inés. -Pues claro, siempre cumplo mi palabra. Inés sonrió y aceleramos aún más el paso. Terminamos corriendo los dos. Cuando divisamos a los chicos, nos dirigimos a ellos. -Mierda, hace mucho que se ha ido? – pregunté yo jadeando por la carrera. -Un rato, pero corred, quizá la cogéis! – dijo Louis indicándonos la dirección por la que se había ido. Seguimos corriendo y al fin llegamos a la entrada del control de seguridad. -Perdone, tenemos una amiga allí dentro que se ha dejado algo importante y… El policía me interrumpió diciendo: -Si tiene algo, me lo da a mí y yo se lo haré llegar. -Pero es que… -No les dejaré pasar – dijo secamente cortándome de nuevo. -Usted sabe quién soy? –pregunté molesto. -No señor, ni me importa, por favor apártese que está creando cola. Miré atrás y vi que cuatro personas esperaban nerviosas esperando para poder pasar. -Pero necesitamos verla, por favor – dije intentando ser amable. -Le he dicho que no es posible, lo siento. Vi que seguir discutiendo con ese hombre no iba a servirnos de nada así que cogí a Inés de la mano y me la llevé conmigo apartándonos un poco del control de seguridad. -Y qué hacemos ahora? – preguntó preocupada. -No te preocupes, soy Harry Styles, de algún modo lo conseguiremos. Eso sonó un poco prepotente pero era la pura realidad, el hecho de ser famoso me aportaba algunas ventajas respecto al resto. Me acerqué a una chica bastante joven que iba vestida de azafata. -Perdone señorita – dije para que se girara. En cuanto me vio y me reconoció sus ojos se abrieron como platos. “Bien, una fan” pensé. -Tú eres Ha-Harry Styles! – dijo emocionada. Sonreí ampliamente intentando caerle bien y le dije: -El mismo. Podrías hacerme un favor preciosa? Le guiñé un ojo y ella se sonrojó. -Po-Por supuesto, qué quiere? -Necesito entrar ahí – señalé las puertas de embarque – una amiga mía está a punto de irse y se ha dejado una cosa. -En eso no puedo ayudarle, lo siento – dijo nerviosa. -Seguro? Me acerqué un poco a ella intentando ponerla nerviosa. -Ehhh n-no sé, veré que p-puedo hacer. -Perfecto – volví a sonreírle – muchas gracias encanto. Le di un beso en la mejilla y la seguimos por los pasillos. -Pasen por aquí – dijo abriendo una puerta y esperando a que pasáramos Inés y yo – sigan recto por este pasillo y en cuanto lleguen al final entren por la puerta de la izquierda y ya estarán dentro. Si se encuentran con alguien de seguridad no digan que he sido yo la que les ha dejado pasar. -Descuida. Muchísimas gracias preciosa, nos has salvado la vida. Volvió a sonrojarse mientras me sonreía y fuimos por donde nos indicó. -Vaya, cómo lo haces? – preguntó Inés cuando ya estábamos solos. -Era una fan, ha sido fácil. -Seguro que la has intimidado pobrecita. -Para nada, solo le he mostrado mis encantos. -Eres un fantasma – dijo riendo. -Lo sé, pero me quieres. -En el fondo sí. Me dio un pequeño pico y seguimos andando a paso rápido, casi corríamos. Al fin llegamos a la puerta que nos dijo y al salir vimos miles de puertas de embarque llenas de gente por todas partes. -Y ahora qué? – preguntó Inés preocupada – no sabemos por cual se ha ido. Me acerqué a una pantalla que había a un lado donde había una lista de los próximos vuelos en salir. -Mira, debe ser este – dije señalando uno que ponía en destinación a Irlanda. -Qué puerta? – preguntó nerviosa. -La 101. Miré la puerta que teníamos delante y vi que era la 89. -Vamos, si corremos quizá lleguemos, en la pantalla ponía que iba con retraso. – dije cogiendo a Inés del brazo. Empezamos a correr hacia la derecha cuando oímos que por la megafonía decían: “Pasajeros con destinación a Irlanda, les informamos de que el vuelo ha sido cancelado por motivos técnicos, sentimos las molestias”. NARRA JANET Perfecto. Ahora me acababan de cancelar el vuelo. Me acerqué a una azafata y le dije: -Perdone, qué ha pasado exactamente? Cuando he llegado se suponía que solo era una avería y que podía arreglarse. -Lo siento señora, ha resultado ser más complicado de lo que parecía y el avión no estará listo hasta por lo menos mañana. -Pero nos van a devolver el dinero o a darnos billetes para otro vuelo no? -Supongo que sí, vaya al punto de información y allí se lo arreglarán todo. -Vale, muchas gracias. Le sonreí y me fui en busca del punto de información. En cuanto lo encontré, hice menos de un minuto de cola y me atendió una señora bastante amable. Conseguí que me cambiara el billete por otro para un vuelo que salía mañana por la mañana. Cogí el billete, fui a recoger mi maleta donde me indicó y me dirigí fuera del aeropuerto para ver si aún estaban los chicos por allí. NARRA NIALL Llevábamos ya un buen rato esperando a Inés y Harry así que decidimos ir a la cafetería a por algo de comer. Al cabo de un rato me sonó el móvil, era Inés. -Habéis podido hablar con ella? – pregunté nada más cogerlo. -No, no sabemos dónde se ha metido. Hace un rato han anunciado por megafonía que anulaban su vuelo pero nos hemos recorrido todos los puntos de información y ni rastro de ella. -Vaya… la habéis llamado al móvil? -Sí, pero no tiene cobertura. -Y dónde se habrá metido? -Pues ni idea, quizá ha conseguido otro vuelo para ahora mismo o algo así… -Jo, pues lo siento Inés… Bueno siempre puedes hablar con ella por teléfono o cuando vuelvas a Irlanda. -Sí… - se hizo un silencio – En fin, que Harry y yo vamos a buscar el coche y nos vamos, venís? -Sí claro, id tirando, quedamos en casa nuestra para comer vale? -Vale, adiós. Colgué y les anuncié a los demás lo ocurrido. Estuvimos un rato hablando de ello y al fin nos fuimos a los coches para irnos. NARRA HARRY -Tenemos que ir a por esas fans antes de irnos – le recordé a Inés. -Es verdad, venga vamos rápido que tengo ganas de llegar a casa. Me cogió la mano y nos dirigimos hacia allí. Cuando me vieron llegar las chicas empezaron a gritar como locas y alguna hasta lloraba. Había como unas 10 más que las que me habían parado antes. -Hola chicas, ahora sí que puedo atenderos – dije acercándome a ellas sonriendo. Estuvimos un rato atendiéndolas a todas. Fue gracioso porque algunas hasta le pidieron una foto a Inés. Me encantaba ver como se sonrojaba y hablaba tímidamente con ellas, era adorable. Cuando terminamos, nos fuimos hacia el coche en dirección a casa. NARRA JANET Al no encontrarme con los chicos por el aeropuerto, decidí coger un taxi e ir para su casa. Probablemente habrían ido para allí cuando me dejaron. Primero fui a casa de las chicas pero no estaban, volví a subir al taxi y le dije que me llevara a casa de los chicos, pero tampoco estaban, así que decidí irme a un restaurante a comer. Lo que más me jodía era que no podía llamarles para saber dónde estaban porque no tenía batería en el móvil. Decidí que en cuanto terminara de comer volvería a pasarme por sus casas, y que si no estaban me iría a una cabina o algo a llamarlos. ---------------------------------------------- No tengo tiempo, lo siento. Comentad, gracias por leer, os quiero un monton! Un beso! *