#Touchthesky.
Capítulo 4.

Me sentía en blanco, no sabía como reaccionar, ¿dónde estaba Sofía?, llegué llorando a la habitación y para mi sorpresa.... ella ya no estaba ahí. Por mi cabeza pasaron millones de cosas, ¿estará muerta? ¿qué pasó con ella? de solo pensar eso me dieron ganas de llorar, me recargué en el marco de la puerta y comencé a llorar. ¿POR QUÉ DIOS POR QUÉ? ¿POR QUÉ ME PASA ESTO A MI?.
Llevé mi mano a mi cabello y lo comencé a mover, enfurecido golpee la puerta unas veces.
Alguien me tocó el hombro, me limpié con la muñeca mi nariz, voltee y eran sus padres.
No dijeron nada, la mamá de Sofía tenía a Catherine en brazos.
—¡¿Dónde está Sofía?!—les dije sin contenerme.
Permanecieron callados.
—No pasó nada malo, solo la transfirieron a otro hospital pero....
—¿Pero? ¿Qué pasó?—digo.
—Se la llevaron porque su estado es muy grave. 
—¿GRAVE?—grito.
—Sofía talvez nunca despierte—dice el padre.
Me dejo caer al piso, estaba perdido, no sabía que hacer, me puse a llorar, eso, eso era, lo único que podía hacer. Llorar.
—Llorar no resuelve nada—me dice la madre que secaba sus lagrimas. La miré con mala cara y le dije:
—Usted no sabe como me siento, me siento vacío, me siento solo. El amor de mi vida está en coma. LA MUJER QUE AMO.
—¡Te entiendo Harry! ¡Es mi hija!.
—¡NO! ¡Nadie me entiende! ¡Nadie!—me levanto del piso, y salgo enfurecido del hospital.
Salgo y me pongo al lado de unos botes de basura, los golpeo, comienzo a gritar. 
— Quédate conmigo Sofía....—susurro—te quiero conmigo—miré al cielo, que estaba adornado de estrellas, se podía ver la luna llena en otra esquina.

—Te ves guapísimo hijo—me dice mi madre arreglándome el moño que tenía en mi camisa.
—Gracias mamá—le digo sonriendo.
—¿Te sientes cómodo con ese traje?—ambos volteamos al espejo, me ví, me veía tan... casual.
—Me molesta un poco el pantalón—digo haciendo una mueca.
—Eso se puede arreglar—me toca el hombro—No lo puedo creer, ya te vas a casar.
—Todavía no hay fecha mamá—le recuerdo y sonrío risueño.
—Aún te recuerdo de bebé.
Comienzo a reír. —Era un bebé hermoso.
—Ahora en pensar en que unos años habrá minis Harry's corriendo por tu casa.
—No lo creo. 
—¿No han hablado de tener hijos?.
—Apenas nos casaremos mamá.
—Bueno.... yo solo digo.
—Aunque Sofía está muy emocionada sobre la boda.
—Lo sé, pasé a verla hace rato y le comenté de eso.
—¿De tener hijos?—pregunto nervioso.
—¡Si! aunque... se puso muy nerviosa.
—¿Nerviosa?—repito.
—Bueno tu pregunta la incomodó.
—De hecho no, comenzó a reír, después le agarró su risa nerviosa y cambió de tema.
—Yo no se si quiera hijos.

Conducí con Catherine hasta el otro hospital, pregunté por Sofía me indicaron la habitación. No, me dolía verla ahí. Quisiera arrancarme este dolor que siento, Catherine estaba en la carriola dormida, la miré, era ta hermosa. —Siento que tengas que ver a tus padres así—le dije mientras trataba de hablar bien, mi voz era cortada, con el nudo en la garganta y el rostro empapado de lagrimas.
Entré, hice el menor ruido posible, no paraba de llorar, con mi muñeca limpié mis lagrimas que caían sobre mi cara, puse a Catherine a un lado de su madre.
Las vi a ambas y lloré en silencio.
—¿Por qué?... Dime Sofía. Me hubieras comentado sobre ella, sobre nuestra hija. Se que tenías miedo pero yo siempre estaré ahí para ustedes, no importa que pase... me prometiste que siempre estarías ahí para mi.
Lo sabía, era imposible hablarle, solo me dolía más, solo lloraba más, solo.... solo.... solo me hacía amarla más, la quería conmigo. Eso es aferrarse, pero la amo. Me aferraré a ella, sea lo que sea, nunca la dejaré sola.
Catherine se movió de lugar, y despertó, su llanto comenzó a escucharse, me recordó cuando nació, fue una gran sorpresa (pues yo no sabía nada).
Dejé de ver a Sofía unos 3 meses, ella había puesto la excusa que tenía que ir a un "campamento" de bodas, (que eran los meses de 7,8 y 9 de embarazo) yo de estúpido le creí, solo escondía su barriga de mi.
Esa noche (hace 4 días) recibí una llamada de sus padres, su madre se encontraba llorando, me dijo que llegara al hospital lo más rápido posible. Cuando llegué miré a mis conocidos todos ahí sentados llorando. Al preguntarles que había pasado mi madre me dijo: —Harry, prométeme que serás muy fuerte ante todo.
Yo preguntaba nervioso que pasaba, al momento que mi madre me llevó a donde Sofía estaba, ¿cómo estaba? acostada en una cama de hospital, con los ojos cerrados y unos cables, grité, lloré, pataleé. Entré y miré a una bebé (Catherine) era ella. Unas horas después me explicaron que ella había quedado en coma y la bebé... era mi hija.
La verdad era que Sofía se había quedado estos meses en la casa de su mamá, "por eso quiso poner fecha para el próximo año, para la boda" dije llorando. Pero si ella no hubiera terminado así, ¿qué hubiera pasado si estuviera conmigo? ¿Cómo me diría lo de Catherine?.


~2 semanas después.

Catherine se había quedado con mi hermana, Gemma.
Mi madre platicaba conmigo sobre como le iba en la casa.
—Harold—dijo—¿no tienes hambre? te noto muy... delgado.
Era verdad, en estas dos semanas que pasaron no quería comer nada.
—Estoy bien mamá—mentí.
—Ten—busca en su bolso....—toma—me extiende una bolsa de cacahuates.
—No gracias—repito.
—¡Vamos! Tienes que comer algo.
—Esta bien—los acepto, pongo algunos en la palma de mi mano y me los meto en la boca.
—Eso eso—me dice.
La miro y sonrío.
—Mamá...
—¿Sí?.
—¿Tu sabías algo del embarazo de Sofía?.
Mi madre se queda pensativa.
—Si, yo sabía.
—¿por qué no me dijiste?.
—Ella me pidió que no lo hiciera.
—¿Qué?....
—Pues... solo me enteré a los 8 meses.
—¿Cómo?.
—Era obvio Harry, un día ella se quitó la sudadera y le noté la panza, después de eso comenzó a llorar.
—¿y no me lo dijeron?.
Mi madre suspiró.
Escuchamos unas pisadas, miramos desde la ventana de la habitación al doctor, nos miró y sonrío.
—Buenas noticias—anuncia.
—¿Qué quiere decir?.